Molino Rojo y Fernet

Los Poemas Que No Encuentran Editor
de Conrado Yasenza
EL Dolor
​
¿Puedo hablar sobre el dolor?​
¿Puedo, me dejan, hablar del mÃo,​
dolor de mundo?​
El miedo,​
¿no se hace terror en el que mira​
y se aleja trasnformándolo en suyo?.​
El mundo es un lugar de muerte y frÃo​
y no valen las metáforas, !ahh¡, sÃ,​
no valen más,​
festejadores de la espuma​
y el carnaval en orden.​
Se esfumaron las calesitas porque alguien​
las prohibió,​
¡ahh!, sÃ, sÃ, las prohibieron cuando Jesús​
se mareó y vomitó sangre y escupió por el costado​
la sortija del perverso calesitero.​
¡Por Dios!, dónde estabas entonces​
cuando mi cara de espanto, esa, la que en la calle​
aleja a la gente;​
duraznos y peras en maceración​
un par de plumas idénticas a la noche.​
Mi sueño es el del sin rostro​
siempre ahÃ, inmóvil, paciente​
con todo el horror del mundo en sus facciones​
blancas espesas como la bruma​
indefinidas y por siempre blancas.​
Pero, ¡Dios!, yo estoy rojo y azul,​
me observo y examino como un forense alcoholizado,​
y me despierto sin dormir aún​
y ¡ahh!, soy rojo otra vez,​
soy dolor atrapado entre cinismos​
porque ¿me dejan hablar de mi dolor?​
¿puedo, entre tanta muerte,​
mientras Jesús sigue escupiendo sangre​
desde la calesita que gira y lo clava todavÃa​
con goce mayor y centrÃfugo?.​
Qué es mi dolor sino el mundo,​
la calesita, el color rojo, Jesús escupiendo​
las pocas espinas que le dejaron, la vigilia,​
los vecinos inquisidores​
la gorda que mide, dÃa a dÃa, mi cuerda,​
las sombras sin rostro​
espesas brumas frÃas​
galerÃa inútil de bronces​
medallas​
mitos​
murallas​
y medallones de menta.​
¡Ahh, soy el Dios de las cenizas​
y las piedras oscuras !​
El mundo es un dolor como el mÃo,​
un dolor asÃ​
tan antigüo como el egoÃsmo de las momias.​
¡ Brindemos !. ¡ Ahh, sà !,​
y escupamos entonces tranquilos al cielo.

Conrado Yasenza (18 de diciembre de 2012)
Ilustración de http://brokenfingaz.com/
Haiku
soy un poeta sin libro,
como un efÃmero clavel del aire.
Conrado Yasenza